AMOR EN STREAM - CAPÍTULO 1: COMO NOS CONOCIDMOS.

 

Eran las doce del medio día del 8 de Julio, era verano en la ciudad de Cartagena en la Región de Murcia. Hacía un calor sofocante, el sol brillaba en lo alto, y la falta de árboles hacía que la sombra fuese escasa, el sol brillaba sobre el gris asfalto haciendo que la vista se cansara algo más rápido. Sin embargo, eso no frenaba a Andreas, o como se llamaba en sus redes sociales, Dreas, a quién le habían pagado una colaboración en el Kiosco frente al puerto para promocionarlo.

Así pues, ahí estaba el sentado en una de las sillas, su cabello rubio y liso, cubierto con una gorra y el flequillo hacia un lado. Vestía con un mono vaquero de patas cortas, bastante por encima de la rodilla, una camiseta blanca en la parte de arriba y unas vans rosas en los píes. Dreas era conocido por su sentido en la moda algo más femenino.

- Hora Turbs - Decía sentado hablando hacia su móvil. Estaba haciendo una emisión en directo por su cuenta de Instagram, sus espectadores iban subiendo exponencialmente mientras él tomaba un vaso alto y transparente - Hoy estoy en el puerto de Cartagena. Hace mucho calor, así que estoy tomando un Smothie de Kiwi y Manzana en este local - Giró el móvil para enfocar el emplazamiento, y volvió a enfocarse a si mismo mientras bebía de su vaso y soltaba un largo suspiro - Es muy refrescante, me encanta el sabor tropical del kiwi en esta época, ¿a vosotros no os pasa lo mismo?

Se ajustó las gafas de vista mientras dejaba el móvil apoyado en un servilletero. Había una leve brisa veraniega que movía su flequillo a uno y otro lado. Agradeció la sombra del toldo que le permitía ver bien la pantalla de su móvil. Se ajustó mirando el móvil un poco el flequillo con los dedos y mientras sonreía iba comentando los comentarios de sus seguidores de forma muy animada.

Los minutos iban pasando y él estaba en el local. Cada vez iba bebiendo más de su vaso mientras se lo terminaba en directo. Pero era Cartagena, una ciudad no muy grande, en la que él mismo había deseado establecerse, lo que también hacia que sus seguidores pudiesen localizarlo rápido. Pronto, muchos de su seguidores iban llegando al local, pidiendo alguna bebida y sentándose al rededor de él. Al final la colaboración estaba siendo productiva para ambas partes. Pues aunque solo fuera por la oportunidad de saludar a Dreas, muchos ya estaban sentados al rededor y el local estaba ya repleto. Pasado un rato y cuando su directo ya llevaba unos cuarenta minutos de duración, Andreas se preparaba para cerrarlo.

- Rurbs, va siendo hora de cortar con este Directo - Empezó a despedirse. Cogió el móvil de la mesa y se puso en pie, enfocando con la cámara del directo a su alrededor para mostrar dónde estaba, y mostrar toda la gente que había a su alrededor.

Sin saber porqué, algunas de las personas a las que había estado enfocando, comenzaron a cuchichear mientras miraban a uno de los lados del local, y desde el directo había de pronto comentarios, que ya no solo se centraban en Andreas, sino sobre un chico que se veía al fondo.

"TONSHU"

"No me puedo creer que esté en el directo de DREAS"

"Es que son amigos?"

"Tonshu vive en Cartagena?"

"Ha quedado con Dreas?"

Andreas miró a su alrededor para comprobar de quién estaban hablando. No sabía quién era ese Tonshu, no le sonaba ningún influencer con ese nombre. Pero, no tardó mucho en darse cuenta quién era el verdadero foco de esos cuchicheos, pues algunas de las personas sentadas en el local se empezaron a levantar e ir hacia el chico que había un poco más lejos.

Andreas lo miró durante unos segundos, no le parecía un chico al que conociese de redes sociales. Era un chico de ascendencia asiática, lo notaba por su tonalidad de piel y ojos rasgados, su pelo corto, negro y liso y gafas de vista también. Vestía con unos vaqueros largos, una camisa de cuadros blancos y azules y una camiseta blanca básica. Le pareció un chico común, y no entendía como le había quitado el foco en su propio evento. Se sintió al principio algo celoso, así que decidió acercarse a él.

Las personas que rodeaban a Tonshu se hacían selfies con él, y le pedían autógrafos. Tonshu no llegaba a pronunciar palabras, pero se dejaba hacer las fotos y firmaba cuando le pedían. Cuando Andreas ya estaba cerca, le pareció mucho más guapo. El aura que le rodeaba dejaba algo de misterio en el ambiente, era alto, se notaba que se ejercitaba en el gimnasio.

- ¿DREAS Y TONSHU ESTÁN CERCA? ¿ENTONCES SI QUE TRATA DE ÉL?

Se oyó un grito y de pronto muchos de ellos empezaron a gritar cosas que le resultaban incomprensibles a Andreas, quién se dio cuenta que tendría que salir de allí rápido o iba a resultar imposible. Tuvo una rápida idea y cogió de la mano a Tonshu, quién sin saber porqué y para sorpresa del propio Andreas, le devolvió el agarre.

- Turbs, muchas gracias por haber venido a verme, y guardar el secreto de nuestra cita 

Andreas les dedicó un guiño del ojo, mientras se ponía un dedo entre los labios, indicando un gesto de silencio. Luego, tras sujetar la mano de Tonshu con algo más de fuerza, tiró de este y empezó a alejarse mientras el resto de personas se quedaban ahí.

Tonshu por su parte, también apretó la mano de Andreas, el tiktoker, el modelo, el influencer. Era Dreas, el chico al que seguía y en el que se había inspirado para crear a uno de los personajes de su webcomic más importantes, y el que era un éxito en ventas "Love is more than Fame". El seme de su historia estaba dándole la mano, y aún no era capaz de reaccionar.

Cuándo los dos se habían alejado lo suficiente. Andreas le soltó la mano y se puso frente a él. Tonshu se quedó cabizbajo mirándose la mano, nervioso y algo sonrojado. No había hecho algo parecido nunca, pero es que Andreas tampoco había hecho nada parecido, y cuándo se percató de sus acciones, tampoco pudo evitar ponerse rojo. Además, ¿cómo era posible que no se hubiese dado cuenta de lo guapo y lo bueno que estaba ESE CHICO en el momento en que lo vio? La impresión ahora hasta hizo que diese un paso hacia atrás y el corazón se le acelerase. Abrió los labios pero, ni si quiera salían palabras de entre ellos.

- ¿Teníamos una cita...? - Fue Tonshu quién, al poco alzó la vista y se quedó mirando a Dreas sonrojado. El shock había sido tal, que no recordaba ahora mismo si había quedado con alguien, ¿y si resultaba que había hablado con alguien por grinder y resultaba ser Dreas?

Andreas, siguió callado. Su vista no paraba de recorrer el cuerpo y la cara de Tonshu. Se daba cuenta de lo que al principio le había parecido soso, ahora derrochaba atractivo por todos sus poros. Hasta su voz, eso había sido su voz, y era completamente seductora. Un tono grave y dulce, masculino, que parecía acariciar el aire con cada sonido.

- trevligt att träffas - Fue lo único que salió de la boca de Andreas, quién sin darse cuenta, había hablado en Sueco, su lengua materna. 

Tonshu, por supuesto, no fue capaz de entender lo que le había dicho Andreas. Se inclinó ligeramente hacia el contrario y sacó su smartphone, con la aplicación de grinder. Estuvo revisando en esta y negó enseñando el móvil a Andreas. Estaba algo triste, pero tenía que asumir que él no era su cita.

- Creo que te has confundido. Yo no había quedado con nadie - Hizo una pequeña pausa mientras presionaba los dos labios, no quería que su experiencia terminase ahí. No cuando, se había encontrado con su crush y este hasta le había cogido la mano - Pero, estoy libre. Me encantaría la cita contigo.

Andreas seguía algo confundido. No entendía muy bien ese aura que de pronto le había invadido, el temblor que sentía en su cuerpo cada vez que Tonshu hablaba. Pero se dio cuenta, de que tenía que reaccionar rápido. Hizo acopio de fuerzas y consiguió centrarse.

- Cla-claro - Se puso la mano en la boca. Él no tartamudeaba, ¿Por qué había tartamudeado? - Podemos tener una cita, te invito a comer - Se puso la mano entonces en la mejilla para disimular su sonrojo. Dió gracias a su maquillaje que supuso le ayudaría a cubrirse - Si digo sushi, ¿sería racista?

Trató de soltar alguna gracia, de esta forma, sería más fácil romper el hielo. Quería además sacar todo su carisma para conseguir atraer a Tonshu, de la misma forma que él lo había hecho. Tonshu le miró a los ojos, soltó una leve risa y aprovechó para retirar la mirada de esos ojos que había visto en fotos tantas veces.

- Me gusta el sushi. Mi familia tiene un restaurante, podría invitarte yo.

- ¿Me presentarás a tu familia en la primera cita ? - Soltó alzando las cejas algo más relajado. Estaba intentando mantener el animo alto.

Tonshu abrió los ojos de par en par al darse cuenta, cierto, su familia lo conocería en la primera cita. Pero, eso significa que sería una cita romántica. Iba a TENER UNA CITA ROMÁNTICA CON ANDREAS. 

- ¿Vamos a por una pizza y ya? Me gusta Dominos - Se corrigió Tonshu mientras llevaba su mano a la nuca, en gesto algo nervioso.

- Claro, ¿Vamos a por pizza y la comemos en mi ático? Yo vivo solo - Andreas le ofrece entonces la mano. Tonshu la tomo sonriendo algo nervioso. En ese momento, el tiempo pareció detenerse mientras los dos se miraban a los ojos.